Calaverita Peña Nieto / Versión actualizada 2013

Estaba la calavera sentada en el panteón

leyendo un buen libro cuando un ruido la interrumpió

no sabríamos decir si fue un quejido o un rebuzno

pero fue tan tenebroso que hizo temblar al inframundo.

 

La calavera muy molesta buscó el origen del sonido

recorriendo el cementerio entero sin encontrar rastro alguno

no fue hasta llegar a los baños que por fin hallo a un muerto trajeado

asustado y copetón.

 

Al verla entrar rápidamente soltó un extraño discurso:

¿ar yu de Yin Juan Yin guaif  or de responsable tu dis infrastructur?

La calaca de inmediato puso cara de sorpresa pues desconocía por completo

esa extraña lengua.

 

-Yo soy la muerte y dirijo este lugar

dime tu de donde vienes y como te he de llamar

-Andaba de gira  por dos estados: Monterrey y Tijuana

y en una escala fui abatido a librasos por maestros y amas de casa.

Busqué refugio en Televisa sin éxito alguno

pues no estaba suscribido en la lista de ese turno.

Me llamo Enrique Peña Nieto pero puedes decirme bombón,

o mirey o papacito te lo dejo a tu elección.

 

Los dientes de la calaca comenzaron a castañear

pues tanta estupidez junta no podía soportar.

Para dejarte entrar a mi reino debes pasar un examen

pero si lo repruebas sufrirás como nadie.

 

¿No aceptas tarjetas Soriana o recargas de Telcel?

puedo darte una foto mía autografiada de revés;

también tengo despensas, loncheras y labiales

pero si te portas bien conmigo puedo darte a mis fieles animales.

Tengo perros uniformados y gatos sin uniformar,

mandriles en los curules y una mula que sabe actuar.

 

Aquí no hay tranzas ni palancas- dijo la muerte enojada

O respondes o te chingas – afirmó muy indignada

Son solo dos preguntas las que te voy a hacer,

si te equivocas en alguna lo vas a padecer:

 

-¿Quién es el autor del Llano en Llamas?

-Pedro Páramo

-¿Cual es la capital de Veracruz?

-Boca del río – dijo él

 

Peña Nieto sudaba de terror al evidenciar su estupidez, pues sabía que a la muerte

no se la podía joder. Con ella no habría reformas, ni represión que funcionara

y el en reino de la muerte no lo salvaría su linda cara.

 

En las dos has errado y por tu ignorancia pagarás

pues con los de la coordinadora diariamente clases tomarás;

por la mañana y por la tarde tendrás clases con los maestros,

y por las noches te vendrán a visitar los macheteros de Atenco.

 

De esta manera pasarás la eternidad,

sin  teleprompter ni reflectores que te ayuden a destacar;

no podrás comprar a nadie con despensas ni sonrisas

pero pagarás caro lo que hiciste en la otra vida.

 

 

Peña Nieto resignado mirò a los militares

¡vengan esos cinco! les dijo en lugar de saludarles

Le dieron la espalda y marcharon hacia su propia expiación

pues  chingar al pueblo del que vienen  es un acto de traición.